martes, 7 de enero de 2014

YULE/ ALBAN ARTHAN - SOLSTICIO DE INVIERNO

La creación de mundo se reproduce cada año, es la eterna repetición del milagro de renovación cosmológico, que transforma cada Año Nuevo en una inauguración de una era, y permite el retorno de los muertos a la vida.

En este periodo el dios (el padre celestial, símbolo del sol y de la luz) nace de la diosa (madre tierra) durante el solsticio de invierno, en el momento de oscuridad máxima y el reinado de los espíritus malignos. Así como después del solsticio empieza a alargarse el día y aumenta la luz, así crece el poder del dios solar, el cual vencerá la oscuridad en primavera. En la víspera de 1 de mayo (la noche Valpurgis o Beltaine) el dios y la diosa hacen el amor y conciben el nuevo dios que nacerá otra vez en el solsticio de invierno. Mientras tanto el viejo dios envejece y se debilita. Muere en la víspera de 1 de noviembre, o sea en la festividad de Samhain.
Podemos comprobar la concepción del fin y del comienzo de un periodo temporal fundado en la observación de los ritmos biocósmicos y de la regeneración periódica de la vida.




Las fiestas de Yule (del nórdico antiguoJul) se celebran cada solsticio de invierno. La fiesta pagana de Júl tiene su origen en la Escandinavia precristiana. Constituía sobre todo una fiesta de la familia y estuvo siempre dedicada a la fertilidad. Era una festividad donde también se recordaba a los ancestros, los amigos ausentes, y la mesa donde se celebraba la fiesta se preparaba con esplendor y magnificencia, ante la tumba de los parientes fallecidos y priorizando la hospitalidad hacia los forasteros.
Las fiestas de Yule se celebran en el solsticio de invierno: en el hemisferio norte, cerca del 21 de diciembre, y en el hemisferio sur, alrededor de 21 de junio.
Yule y Yuletide, al igual que la "Festividad de yalda" (una fiesta invernal iraní), son términos arcaicos indoeuropeos usados para referirse a la tradición antigua que observa los cambios naturales causados por la rotación del sol alrededor de la tierra y sus efectos en la cosecha alimenticia durante el solsticio invernal o solsticio de invierno. En la celebración de Yuletide, como en aquélla, es costumbre entonar canciones para proveer así una atmósfera relajada.
En la actualidad se suele considerar el período festivo comprendido desde el día de Nochebuena hasta después del primer día del año o, especialmente en Inglaterra, hasta el día de Reyes.
  


Los romanos también celebraban el solsticio de invierno, cuando "el sol vence a las tinieblas" y empiezan a alargarse los días. La fiesta Saturnales duraba varios días y era cuando el dios Saturno volvía a la tierra. Al Saturno, dios del fuego y de la buena cosecha, había que venerar de la manera que se merece, así que se llevaban a cabo ofrendas. Se le ofrecían al dios de una manera ritual sacrificios humanos, sobre todo niños para paliar su ira y asegurar una buena cosecha para el próximo año…


Rituales relacionados con Yule

Encender el leño de Yule, del leño del año anterior, y hacerlo arder por 12 horas. Luego se esparcían las cenizas por los campos para hacerlos fértiles.
Decorar las viviendas con muérdago, por ser el que crece en el roble.
Mantener una vigilia nocturna para esperar el sol.
Apagar todas las luces y prenderlas de una a una por frotación.
Dejar una vela encendida en la ventana.
Colgar figuras de madera en la puerta de la vivienda como la Cabra Yule.

En estas fechas podemos preguntarnos a nosotros mismos: como y en que aspectos de mi vida puedo convertirme en la semilla de mi propio renacimiento?

No hay comentarios:

Publicar un comentario